El año 2019 constituyó un periodo de numerosos desafíos para la Empresa de Construcción y Montaje ATTAI de Pinar del Río; pero sus trabajadores estuvieron a la altura de los retos y materializaron cada una de las obras con el empeño que los distingue.
Trabajamos en el rescate de capacidades de la Unión Cuba-Petróleo (CUPET) y en el sistema de enfriamiento de la planta de gas licuado de Pinar del Río, apuntó Frank Amarán Armenteros, director de producción de la entidad.
Acometimos parte del CUPET que está en el kilómetro 27 y medio de la autopista Habana- Pinar, en Mariel; y ejecutamos viviendas en Quiebra Hacha, destinadas a la Zona Especial de Desarrollo, dijo.
Los comienzos del calendario exigieron asimismo la participación de parte de su colectivo en la recuperación de las afectaciones ocasionadas por el tornado que azotó a varios municipios de La Habana, el 27 de enero.
Realizaron el movimiento de tierra para la urbanización del poblado de Castanedo, en Guanabacoa. También intervinieron en la limpieza y saneamiento de los daños derivados de ese fenómeno.
Pero las manos de los hombres y mujeres de ATTAI han estado incansablemente en metas de vital trascendencia por su impacto social en Pinar del Río, como el programa de la vivienda.
En la provincia con mayores afectaciones por huracanes, se pretende resolver en cuatro años los casos aún pendientes. Para ello, fueron convocados organismos y empresas de cara a asumir compromisos viables que se tradujeran en casas para el pueblo.
De unas 300 planificadas a ejecutar en 12 meses por la Empresa de Construcción y Montaje, concluyeron con 11 por encima, cual evidencia de la voluntad de su colectivo y la sensibilidad a la que hizo referencia en la segunda visita gubernamental a Vueltabajo Miguel Díaz- Canel Bermúdez, Presidente de la República.
Las moradas sobresalieron por su buena calidad pese a algunas dificultades con los suministros, solucionadas mediante las producciones locales y otras alternativas, tema que se incluyó en el balance de los resultados de trabajo que cada año convoca a más esfuerzo. 
De igual modo, las Brigadas de Trabajo Socialistas creadas en el mes de septiembre por el Sindicato Provincial de la Construcción, dieron un impulso decisivo a las acciones en los 11 municipios.
Otras obras marcaron la agenda, en pos del desarrollo agrícola de la porción más occidental. Descuellan la micropresa Jagüey, del programa ganadero, para el suministro de agua y la regulación de la fuente de abasto de la Empresa Pecuaria Genética Camilo Cienfuegos; y el almacén de tabaco V- 10- 21, de Tabacuba, destinado a la búsqueda de capacidades de exportación y constituye el primero de su tipo en la provincia a partir del cual se conciliaron nuevos sitios en La Palma y San Juan y Martínez, ambos con la misma tecnología constructiva.
Los silos Victoria de Girón, del municipio de Consolación del Sur, comprenden la instalación y puesta en marcha de cuatro silos de almacenamiento de mil toneladas de capacidad cada uno; en tanto el año pasado completaron el montaje del primero.
Y del programa ganadero, emprendieron la construcción de la cerca perimetral del centro genético El Tigre; la pavimentación del plato de secado de la fábrica de pienso criollo Baró, encaminada a la sustitución de importaciones, y del centro porcino Simón Bolívar.
El secadero y silos de arroz 12 de La Coloma llevan un sello distintivo: la calidad en cada objeto de obra. Que todo se ejecute en tiempo, en consonancia con los manuales confeccionados por la compañía fabricante- de la República Popular China- y a tono con las expectativas para el territorio, depende en gran medida el colectivo de la Empresa.
Ese sitio será el responsable de procesar el grano procedente, principalmente, del polo productivo La Guapa, un proyecto en desarrollo en los municipios de Pinar del Río y San Luis que tiempo atrás se dedicó a la siembra del cereal.
La inversión aumentará en mil toneladas la capacidad de almacenamiento instalada en la provincia, como parte del programa arrocero; en tanto será el sexto secadero con que cuente Vueltabajo y tendrá una capacidad de secado de 37 toneladas diarias.
De la Salud Pública, montaron la carpintería de la sala MB del Hospital Provincial Abel Santamaría Cuadrado, institución en la que, además, laboraron en el internado médico, en el ajuste de una electrobomba para el sistema de abasto de agua, el cercado perimetral y la reparación de la conductora dirigida al tanque elevado.
Fueron destacadas, además, las faenas en el nuevo cuerpo de guardia del Hospital Pediátrico Pepe Portilla, para una mayor concentración de los servicios de urgencia y emergencia.
Contará en un primer nivel con todas las especialidades médicas, incluyendo laboratorio, ultrasonido y rayos X; y áreas de estar interior y exterior. En el segundo piso se prevé un internado médico con capacidad para 22 camas, distribuidas en cinco cuartos, baños y pantry. Del mismo modo, el espacio destinado en la actualidad a tales prestaciones, pudiera aumentar las capacidades para la hospitalización de pacientes, las cuales hoy ascienden a 293 camas, en algunas ocasiones y épocas del año, insuficientes.
Pero el personal de ATTAI no solo se circunscribe a sus responsabilidades, sino que también ha protagonizado jornadas de trabajo productivo en apoyo a otros sectores, como es el caso de la zafadura de tabaco en las escogidas y en labores de higienización en los municipios.
El balance permitió reconocer a las brigadas y trabajadores más destacados durante 2019, conscientes de su misión social, en constante apuesta por diversificar su campo de acción y distinguirse por la calidad de sus ejecuciones.
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