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Aún cuando hasta ahora, su incidencia en la campaña de frío no ha sido significativa, los campesinos pinareños se mantienen atentos a la aparición del trip.
La plaga provocó enormes estragos en el cultivo del frijol el año pasado a lo largo del país, lo cual significó un duro golpe para la economía cubana.
Teniendo en cuenta este precedente, el ingeniero Joel González, jefe del departamento de sanidad vegetal en la Delegación Provincial de la Agricultura de Pinar del Río, explica que se elaboró una estrategia fitosanitaria para el manejo integrado del frijol.
Dentro de las principales medidas indicadas, menciona la de prohibir las siembras antes del 1 de septiembre, con el propósito de romperle el ciclo a la plaga.
“También se orientó evitar la colindancia de los campos de frijol con cultivos que pudieran ser hospederos del trip, como el tomate y el tabaco.
“Además, que entre las plantaciones cercanas, el periodo de siembra no sobrepase los 15 días, buscando que no haya diferente fenología”, detalla el especialista.
Aunque puede hacer daño en otras partes de la planta, el trip tiene la característica de que prefiere las flores. Ello implica que dañe la fecundación y, por consiguiente, la formación de la vaina y el fruto.
Por tanto, el jefe del departamento de sanidad vegetal señala que el
manejo de este perjudicial insecto tiene que empezar desde que la planta forme la primera hoja.
“En ese momento, se inicia con bioproductos como la tabaquina, el Metarhizium anisopliae, el Lecanicillium lecanii y el Bacillus thuringiensis, buscando que los niveles de población bajen, antes de la floración”, añade.
“Otra de las medidas fundamentales, es el establecimiento de barreras de maíz o sorgo, las cuales propician que se desarrollen biorreguladores naturales que se alimentan de la plaga”.
El funcionario asegura que todas las bases productivas recibieron una capacitación al respecto y que también se han empleado los medios de comunicación para asesorar a los campesinos.
El aspecto más preocupante hasta el momento, es que debido a las lluvias asociadas a varios fenómenos meteorológicos que afectaron la provincia, las siembras arrancaron de manera tardía.
“Esto implica en que hay que hacer mayor énfasis en el cumplimiento de los manejos, porque vamos a tener en contra las variables climáticas.
“El trip es una plaga que aparece desde los primeros estadíos de la plantación. Por tanto, no se debe esperar a la floración para revisar si las plantas lo tienen”.
En lo que va de campaña, afirma que ha habido reportes pero no de manera masiva, algo que se debe, entre otras razones, a que los campesinos han aprendido a combatirlo.

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