Lázaro Méndez García y Ramón Antonio Socarras Rodríguez son cubanos felices que combatieron en Girón; son felices porque salieron victoriosos frente a la invasión mercenaria apadrinada por el imperialismo y porque aún siguen en la trinchera de la Revolución.
Los integrantes de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana y la CTC en Guane , se trasladaron hacia sus hogares para intercambiar y reconocer, junto al resto de los vecinos de la comunidad, su valor y entrega a la patria.
Méndez, a la derecha de la foto
Méndez a sus 77 años, con profunda alegría, agradeció el gesto y rememoró las experiencias. " Pertenecía al batallón de las milicias 219 de Colón, en Matanzas, éramos 528 soldados que cumplimos la misión encomendada por Almeida: cerrar toda la carretera desde el central "Australia", hasta Playa Larga, avanzamos hasta llegar a un lugar de la ciénaga donde solo dejamos espacio para pasar la artillería del ejército".
Por su parte Socarras, a sus 83 años, recuerda que formaba parte de un grupo de jóvenes milicianos subordinados al capitán Núñez Jiménez, que en el año 60 se preparaban en armas antitanque y antiaéreas.
Socarrás, al centrio en la foto
Los dos combatientes, no son pinareños de nacimiento, pero si por sentimientos, pero su trayectoria revolucionaria los trajo hasta la provincia para cumplir otras misiones y aquí en la tierra de Isabel Rubio, la Capitana de Occidente, se quedaron para contar su propia historia.
Por motivo de la celebración del VIII Congreso del Partido, reciben el reconocimiento del pueblo agradecido en ocasión de los 60 años de la victoria, que propinó la primera y aplastante derrota militar de Estados Unidos en Latinoamérica
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