Pinar del Río rompió el récord histórico y alcanzó por segundo año consecutivo la tasa más baja en la mortalidad infantil en el país con 2,1 por cada mil nacidos vivos al cierre del 2016.
Según datos ofrecidos por María Teresa Machín López-Portilla, jefa del Programa Materno Infantil (PMI) en la provincia, “al cierre del mes de diciembre, se acumulaban 6 141 nacimientos, para alrededor de 500 mensuales y 20 diarios.
“En consecuencia con el indicativo alcanzado de la mortalidad, se reduce la cifra a 10 fallecidos menos que en el 2015. El propósito del sistema nacional de salud es mantener el número por debajo de cuatro y Pinar del Río siempre ha oscilado entre las provincias de más baja mortalidad.
“Sandino, San Juan y Martínez y Los Palacios lograron una tasa de mortalidad infantil en cero, reconociéndose también la baja cifra alcanzada por el municipio cabecera de 0,9, pues resultó decisivo para el índice de este año, debido al elevado número de nacimientos que siempre tiene”, aclaró la especialista.
En los últimos cinco años ha habido una estabilidad en cuanto al PMI y la tendencia de la mortalidad ha ido a la disminución, resultado que se ha logrado por el trabajo de todo un equipo que garantiza la seguridad y protección de la materna y el bebé.
Según Machín López-Portilla, para lograr resultados positivos intervienen diferentes factores en la atención primaria, como la labor del médico y la enfermera de la familia; los equipos básicos de salud; los especialistas; el Programa de Genética, presente en los 11 municipios y que ha alcanzado tasas inferiores a las del país en los últimos diez años de muertes por anomalías congénitas; y el Sistema de Urgencias Médicas con el traslado del paciente, del neonato y de la materna.
En la atención secundaria resaltan los servicios de Perinatología, el servicio provincial de Neonatología y el banco de leche humana. Por Heidy Pérez Barrera
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