Innovación en favor de la construcción en Pinar del Río

Lázaro Valle Hernández fue uno de los responsables de devolver a su uso a un buldócer de alta potencia Caterpillar D- 8 paralizado hace más de dos años debido a su sistema electrónico complejo, resultado este que, como otros, contribuye a no detener los programas asociados a la construcción en Pinar del Río.

El mecánico A y jefe de brigada del taller de equipos pesados de la Empresa de Construcción y Montaje de la provincia aseguró que tienen como línea extender la vida útil de los equipos, a partir de las prioridades y con el conocimiento de los trabajadores y el quehacer colectivo.

Gracias a la inventiva de quien ha dedicado 45 años de su existencia a la empresa vueltabajera y de otros mecánicos, ya hoy se encuentra lista para la producción esa maquinaria imprescindible en los movimientos de tierra y que forma parte de las más de 70 soluciones aportadas este año por miembros de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (ANIR) de la entidad.

Cada trabajo ha tributado a la sustitución de importaciones de piezas, partes y agregados y a mantener activo el parque existente, sobre todo a partir de que hace más de dos décadas no entran equipos nuevos a la Empresa, aseveró César Díaz Padrón, especialista B en mantenimiento y reparación de talleres.

Con un aporte económico al país que ronda el millón de pesos y unos 300 mil de remuneración a los integrantes de la ANIR, destacó la intervención, además, en cargadores sobre neumáticos, retroexcavadoras y dispositivos pertenecientes a las plantas de asfalto de Pons, en Minas de Matahambre, de y Consolación del Sur. 

Son equipos que en su gran mayoría sobrepasan los 30 años de explotación y no encuentran soluciones en el mercado nacional para asumir las averías ni sus mantenimientos, explicó Nelson Hernández Gutiérrez, administrador del taller de equipos pesados.

El grado de mecanización de la Empresa de Construcción y Montaje está dado fundamentalmente por la iniciativa de los innovadores, acotó.

Hoy contamos con siete buldócer, por ejemplo, cinco de los cuales están de alta, indicó Hernández Gutiérrez quien también se refirió al costo promedio de una maquinaria para la construcción en el mercado internacional, que ronda los 200 mil pesos en moneda libremente convertible, y “con un mínimo de recursos aquí se han recuperado totalmente y puestos en funcionamiento”.

Ante las limitaciones a causa del recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos hacia Cuba y la situación económica global generada por la pandemia, se fortalece el trabajo de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores, incluyendo la fuerza bisoña de las Brigadas Técnicas Juveniles, apuntó Rolando Rivera Gómez, jefe del departamento técnico de la Unidad Básica de Talleres de la Empresa de Construcción y Montaje de Pinar del Río.

Precisó que el esfuerzo e inteligencia de todos ha posibilitado responder a las necesidades técnicas de los equipos de transporte y construcción de la entidad en pos de asegurar la producción y el cumplimiento de los programas en los cuales está implicada, entre ellos, el de la vivienda, movimiento de tierra y la agricultura.

 

 

 

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