La evaluación preconcepcional optimiza y asegura que el embarazo termine con el nacimiento de un niño más sano y una madre libre de complicaciones; un verdadero sueño para la mujer que decide tener hijos.
Una de las intervenciones que tienen mayor impacto antes de la gestación, es el control nutritivo previo para asegurar la salud fetal.
La mujer, debe incorporar a su cuerpo la cantidad recomendada de ácido fólico, importante para las parejas en edad fértil, pues reduce el riesgo de aparición de defectos en el feto, como la espina bífida y la anencefalia, asimismo las hendiduras de cara y boca.
Por otra parte, la mujer portadora de una enfermedad crónica no transmisible, como hipertensión arterial, diabetes mellitus, epilepsia u obesidad, debe acudir al médico para comprobar el comportamiento de su enfermedad.
También, las embarazadas deben evitar exponerse durante su gestación a las picaduras del mosquito Aedes Aegypti, agente transmisor del dengue, el chikungunya, la fiebre amarilla y el zika, sobre todo por la aparición de defectos congénitos en sus bebés.
Es por ello, la importancia de extremar las medidas para garantizar una mejor concepción natal.