Abrió sus puertas la Feria en Pinar

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Con un sentido homenaje a la actriz y escritora desaparecida recientemente Aurora Martínez y al Comandante en Jefe Fidel Castro, inició este miércoles la XXVI edición de la Feria del Libro en Vueltabajo.

El evento en la más occidental de las provincias cubanas reconoce a los escritores pinareños Juan Antonio Martínez de Osaba y Raúl Tortosa.

En la apertura, Osaba, quien se dedica en su mayoría a temas del deporte cubano y presentará por estos días Inmortales del Béisbol Cubano, agradeció el homenaje que le hace la Feria en la provincia. Sobre su obra precisó: “Toda la vida me ha gustado mucho el deporte, sobre todo el béisbol. Me importan más los hombres que los números; las cifras y las estadísticas están en las guías. A mí me interesan los atletas, la significación histórica, el aporte que hacen a la nacionalidad”.

Por su parte Raúl Tortosa, quien tiene en su haber libros de poesía y narrativa, hizo énfasis en que es un orgullo tener la Feria dedicada a su persona: “Es bueno saber que piensan en uno, creo que lo que están homenajeando son mis años de trabajo. Agradezco a la vida por haberme dejado llegar hasta aquí y a quienes se acordaron de mí. Le escribo a la mujer porque soy hijo de una, hermano de otras cuatro, me nace una hija y dos nietas, ¿cómo no hacerlo?

“Siempre nos nutrimos de otros autores y en mi caso lo hago de mis vivencias. No escribo nada que no tenga corazón. Las veces que he llorado lo he llevado a mis letras y sobresale lo testimonial. Ayudé a formar nuevas generaciones durante 40 años, a través de talleres literarios”.

Con más de 1500 títulos y unas 400 novedades, la fiesta de los libros en Pinar del Río vuelve a los tradicionales cepellones en la avenida Martí, arteria principal de la ciudad.

Cauce y Loynaz, ediciones del territorio, colocan a disposición del público unas 50 propuestas literarias entre las que sobresalen El viejo trencito (Loynaz), de Celima Bernal; La ballena rosada y otros relatos (Loynaz), de Luis Hugo Valín; Proyecto Mellizos (Loynaz), de Carlos Ettiel; Osaín, el güije y la noche (Loynaz), de Benigno Horta; Cuentos al azar (Cauce), de María Elena Llana; Como soplos de luz (Cauce), de Nersys Felipe; y Cuentos de mi casa (Cauce), de Aniska Colombé.

Luis Enrique Rodríguez Ortega, director del Centro de Promoción y Desarrollo de la literatura Hermanos Loynaz, resaltó con antelación al evento, la calidad del acabado de los libros, la valía de sus textos e ilustraciones, y calificó este como el momento cumbre de Cauce y Loynaz.

En la inauguración fueron entregados por la Asamblea Provincial del Poder Popular el Escudo Pinareño, máxima condecoración que otorga este órgano, a las personalidades de la cultura Mario Pelegrín Pozo, Premio Nacional de Cultura Comunitaria; Mario García Portela, artista de la plástica; Jesús Benítez Rubio, Premio Nacional de la Radio; y Julio César Valdés Solanes, quien dedicó su vida a la conservación y rescate del patrimonio y ostenta la Orden por la Cultura Cubana y la medalla Raúl Gómez García.

La feria se extenderá hasta el domingo próximo. La sala de presentaciones principal estará en la Casa del Joven Creador y a la vez sesionarán otros espacios entre los que figuran Café entre dos en la Uneac, las salas de espectáculos infantiles en el Museo de Historia, el Patio de los Poetas en La Piscuala, el Café Literario en la Plaza del Artesano, y el Hormiguero Jazz Café a partir de las 10 de la noche en la AHS.

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