El bloqueo de Estados Unidos contra Cuba y la ley de símbolos nacionales conformaron la agenda de esta cuarta etapa de barrio debates de los Comités de Defensa de la Revolución en Mantua.

Bajo esta premisa de enfrentar al imperio desde el barrio, los vecinos de las zonas 50 y 11 condenaron las leyes extraterritoriales del gobierno de los Estados Unidos contra Cuba y pronunciaron las razones por las que es preciso resistir y vencer. El Héroe del Trabajo de la República de Cuba, Luís Camejo Mena definió la posición de los humildes al afirmar que, “nunca un país, un sistema social hizo tanto por las personas sencillas y ese es el motivo más grande que tenemos para defender la Revolución”.

Otro tanto expresó el campesino, José Antonio Valdés, padre de una niña con Síndrome de Down que lleva una infancia feliz, gracias a los programas de salud y enseñanza especial iniciados por el Comandante en Jefe. “Heidy aprendió a leer y escribir, gracias a que nació en Cuba- dijo emocionado, y agregó_ Ella es diabética pero jamás le ha faltado la insulina, gracias a este país que defiendo con toda mi vida, y por eso,  condeno al bloqueo”.

El significado de los símbolos patrios, su importancia para la nación cubana y la necesidad de inculcar a las nuevas generaciones el amor y el respeto a lo que significan fueron aspectos medulares en el debate. La maestra, Marisol Herrera hizo referencia a lo vital de enseñar a los niños a amar la bandera, (…) “a saludarla con fervor y a defenderla con convencimiento de causa desde las edades más tempranas”.

A partir de la propuesta del material audiovisual, los cederistas ratificaron las medidas de ahorro energético, imprescindibles en la actual coyuntura caracterizada por el reforzamiento del bloqueo, esta vez con acciones encaminadas a paralizar la matriz energética del país.

En barrios y comunidades del territorio los ciudadanos dan muestras de apoyo a las medidas que toma el gobierno para garantizar las condiciones de vida y los servicios esenciales a la población en medio del cerco económico y financiero que experimenta el país por más de medio siglo.