Se aproxima el 26 de julio, una fecha que se ha hecho para los cubanos como los cumpleaños de la familia y en el momento de recuento por sectores, les pregunto ¿será muy exagerado decir que los trabajadores de la Salud, en el primer semestre de 2020, se echaron sobre sus hombros a su pueblo?
Es una forma coloquial muy conocida, pero es ellos nunca habían festejado esta efemérides con tanto regocijo y satisfacción; es como si la Revolución todo lo creado durante años en infraestructura, personal especializado, métodos y sistemas lo reservara para en solo unos meses someterlos a su tesis final de examen… que verdaderamente lo aprobó sobresaliente.
No vamos a hacer recuento, ustedes estuvieron pegados a la televisión, la radio y la prensa todos estos meses; Guerrillero y todo el sistema de prensa impresa y el ciberespacio reflejo lo que se hacía y entonces nuestro menguado espacio lo dedicaremos a las cosas recientes menos conocidas.
En medio de la Covid-19 los estudiantes y profesores de las Ciencias Médicas realizaron –y continúan- centenares de miles de pesquisaje; millares de consultas evaluadoras de IRA (infecciones respiratorias agudas) por su posible asociación con el Sars CoV2, todos los médicos y enfermeras, técnicos y empleados de administración y servicio se dedicaron a la epidemia; administraron cada centro, aunque el León Cuervo Rubio fue la unidad de referencia y agrupó a los más necesarios de otras dependencias, incluso el sistema salió de los salones y se adueñó de los campos, hasta tomar por tres puntos la frontera provincial.
Y en ese maremágnum –organizado- las autoridades continuaron ideando, construyendo, modificando y fomentando, para lograr cosas como saludar este 26 con una sala de terapia pediátrica remozada en el Hospital Pepe Portilla; la reapertura del Hogar de Ancianos Luz Záldivar; acometer la segunda etapa de la cocina del Hospital Abel Santamaría Cuadrado y allí mismo se crear para entrenamiento una Aula de simulación de código rojo.
Pero no todo queda ahí, en Consolación del Sur se hizo el Centro FITOMED, el Servicio de ozonoterapia y la consulta para la atención a la pareja infértil. En San Juan y Martínez se remozó el Laboratorio del Policlínico Modesto Gómez Rubio. A nivel de provincia se repararon 17 Consultorios del Médico y Enfermera de la Familia, de ellos 13 en Pinar del Río, dos en Consolación del Sur, uno en Guane y otro en Los Palacios.
No podremos decir todo, pero es imposible obviar, que pesar de la situación epidemiológica la actividad quirúrgica -solo mantenida para casos de urgencias y oncología-, se realizaran 15 859 intervenciones, quizás para no perder el hábito de ser una de las provincias que más opera en el país.
Por las condiciones adversas se realizaron 20 188 ingresos en el hogar, que representan 1714 más que en igual período del año anterior; hubo 1 554 432 consultas de MGI y se hicieron 394368 visitas a terrenos, mientras la Estomatología que estuvo un tiempo solo para urgencias, contabilizó 405 859 consultas.
Quizás este sea uno de los organismos con más controles estadísticos, imposibles de enumerar, por eso solo les hemos mostrado unas pequeñas variables para dejar espacio a otros detalles.
En la Covid-19, propiamente dicha, los pinareños saben que la provincia reportó 52 enfermos en seis municipios del territorio, pero ninguno fallecido y se cumplió con los cinco indicadores sanitarios para el paso de las fases en la etapa de recuperación.
Mientras esto sucedía, la Universidad descentralizaba el sexto año de la carrera de Medicina en cada uno de los municipios, y el resto de los años terminales de las carreras de Estomatología, Tecnologías y Enfermería, incluyendo el técnico medio, con resultados excelentes, y un alto grado de satisfacción de los internos.
Se incrementó el número de especialistas de segundo grado con 335, de másteres con 1584, así como 16 Doctores en Ciencias, aparte de mantener la labor científica con el Citma y otras entidades de investigación.
Por los resultados, es evidente que nada quedó sin hacer, porque aparte de proteger al casi medio millón de habitantes, se aseguró hasta el cierre de junio, 1833 colaboradores en 53 países, lo que supera en 130 lo comparado con el cierre del año 2019.
Pero lo más glorioso son los 235 pinareños que se encuentra en las brigadas Henry Reeve y mientras salvan vidas por el mundo, sus familias son atendidas en el terruño para que descienda en algo la nostalgia.
Mucho queda en el tintero, el Programa materno infantil, la atención a la pareja infértil, los programas de atención al adulto mayor, las enfermedades trasmisibles y las crónicas, el fortalecimiento de los sistemas informáticos, la incorporación a programas de investigación y asistencia médica para mejorar el nivel de vida de la población.
Pero, y el pero nunca va faltar, la carencia momentánea de algún medicamento, los déficits por las razones financieras, comerciales y el bloqueo, porque no podemos olvidar que el mundo entero se detuvo, aunque lo que duele a la gente, es una mala contesta, el mal carácter de un profesional o un empleado como parte de su naturaleza humana, pero eso no quita las virtudes ganadas por el sistema de salud cubano, que muy honroso ha debutado en la pandemia, aunque voces ingratas quieran denigrarlo.
Frontera sanitaria en la Autopista Nacional Pinar del Río- Artemisa
Y no podemos dejar fuera un conjunto de datos del Sistema de Salud Nacional, tomado de una intervención del presidente Miguel Diaz Canel Bermúdez, porque Pinar del Río es parte de ellos.
LA SALUD EN EL PAIS
*Cuba cuenta con 479 623 trabajadores de la salud, que representan el 6,6 % de la población en edad laboral, el 71,2 % son mujeres. La tasa de habitantes por médico es de 116, 86,6 médicos por 10 000 habitantes y la de habitantes por estomatólogo, 566, 17,7 estomatólogos por 10 000 habitantes. Existen 150 hospitales, el 20,0 % tiene 400 camas o más, el 62,7 % entre 100 y 399 camas y un 17,3 % con menos de 100 camas. El Sistema Nacional de Salud dispone de 110 salas de terapia intensiva, 120 áreas intensivas municipales, 449 policlínicos, 111 clínicas estomatológicas, 132 hogares maternos, 12 institutos de investigación, 680 bibliotecas médicas, 155 hogares de ancianos, 295 casas de abuelos, 52 servicios de geriatría y 30 centros médicos psicopedagógicos.
*La formación de recursos humanos, de la salud, ocurre en 13 universidades y 9 facultades de ciencias médicas, 4 facultades de estomatología, 1 de enfermería, 1 de tecnología de la salud, 3 de tecnología y enfermería, 12 filiales de ciencias médicas, la Escuela Latinoamericana.
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