La finca Integral “El Almácigo, ubicada en localidad de Santa Lucía, al norte de Minas de Matahambre, sobresale entre las de su tipo en el municipio por la variedad de cultivos.

Contribuir con la alimentación del pueblo en tiempos de la covid-19, es su principal desafío.

En esta entidad productiva creada hace más de diez años, la máxima de aprovechar cada espacio de tierra fértil se convierte en realidad desde el momento que el sol asoma y deja ver lo conseguido por el colectivo de trabajadores.

Granos, viandas, hortalizas, frutales y plantas medicinales, figuran entre sus principales cultivos:

“Tenemos yuca, malanga, frijol, col, tomate, zanahoria, habichuela, maíz, pepino, espinaca, guayaba, fruta bomba, plátano, cebolla, orégano, ajo puerro y sábila.

Esperamos que dentro de muy poco tiempo podamos ofrecer estos cultivos al pueblo, ya que estamos pasando una situación muy difícil por la pandemia y por las últimas lluvias que nos afectaron.

Así que aunque somos un pequeño colectivo, trabajamos para contribuir con la alimentación, creo que es fundamental en estos tiempos” dijo Alfredo Soler Bejerano, productor de la finca integral el Almácigo.

La vitalidad de estas siembras depende en gran medida de la atención cultural que recibe, lo que se traduce en calidad y rendimientos:

Soler Bejerano aseveró: “Si no atiendes los sembradíos como requieren, no obtendrás buenos resultados. Aquí empleamos fertilizantes orgánicos producidos por nosotros para mejorar el suelo.

Guataqueamos, escardamos, o sea estamos siempre atentos a las labores que debemos realizar.Hay que trabajar la tierra con amor.Es muy difícil que al final no veas el producto de tu esfuerzo”

El fruto de las cosechas de la finca integral El Almácigo, es vendido en los puntos pertenecientes a la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar, con el ánimo de cubrir las demandas cada vez más crecientes de la población.