Esta vez aumentan en 500 hectáreas de tierras cultivables, con respecto al plan anterior, las 20 estructuras productivas de los Cultivos Varios, en la Empresa Municipal de Tabaco de Minas de Matahambre, según informa Samuel Rodríguez Fernández, director quien agrega encontrarse al 91 por ciento del cumplimiento general las siembras previstas.

La plantación de viandas las cumplen al 93 por ciento, el atraso está dado según el directivo, por las deficiencias que muestra el sistema de riego, un aspecto clave, sobre todo para el logro óptimo de la malanga.

Según Rodríguez Fernández, la yuca será la principal vianda que los mineros podrán adquirir en próximos meses en mercados y placitas, mientras la venta de plátano demorará más, al ser un cultivo que demora un año en su crecimiento.

Más de 60 hectáreas fueron plantadas de este último, respondiendo al programa alimentario.

También en la presente campaña intensificaron la siembra de hortalizas, en especial la de habichuela y calabaza, aprovechando al máximo las lluvias del mes de mayo, dos mercancías bien recibida en los puntos de ofertas estatales.

Las atenciones culturales a todos los cultivos plantados es un asunto al cual le prestan gran importancia, para el logro de cosechas y rendimientos superiores. Los campesino practican el escarde, la chapea y la aplicación de materia orgánica, como vía segura para el éxito esperado.

El compromiso de producir más alimentos para la población, es la idea principal que rige en los cooperativistas del municipio, convencidos que el autoabastecimiento alimentario es la vía más directa y práctica de lograr el equilibrio deseado en la sociedad minera, cuando de provisión se trata.

La campaña de siembra de primavera aún reclama más entrega, voluntad y deseos por parte de los productores, quienes tienen ante sí un reto muy singular esta vez en tiempos de pandemia.