A las tres y cincuenta de la madrugada el sonido fuerte del nuevo equipo de bombeo pudo escucharse en el río Peña Blanca, después de nueve horas intensas de trabajo protagonizadas por la brigada de Acueducto y Alcantarillado Minas, especialistas provinciales y de La Habana
La segunda bomba para impulsar el vital líquido (tan esperada por los mineros desde hace cinco meses) pudo localizarse esta vez en el municipio Maisí, provincia Guantánamo, y ser trasladada hasta Minas de Matahambre, una gestión realizada por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos de conjunto con su sede en Vueltabajo y la Asamblea Municipal del Poder Popular.
Yosvany Rubido Asaín, director de ingeniería del Grupo Nacional de Acueducto y Alcantarillado, informó que “las bombas de Minas de Matahambre son únicas de su tipo en Cuba, están situadas topográficamente en una zona donde tienen que vencer una altura estimada de 200 metros para que el agua arribe a la potabilizadora, ubicada en la cima de la montaña, todo un desafío”.
La bomba fue desmontada de un sitio difícil y el traslado hasta el territorio duró tres días.
“Estas bombas se construyen de manera especial para poder dominar grandes alturas de terrenos, bombean 108 metros cúbicos por hora y se imponen a una columna de agua de 145 metros”, explicó por su parte Medardo Sotolongo Hernández, jefe de la Brigada Electromecánica Provincial.
Las cisternas principales asimilan el agua en un periodo de cuatro horas, cuando antes la demora ascendía entre 14 y 16. El equipo de rebombeo se emplazó junto con una pizarra computarizada la cual normalizará el funcionamiento eléctrico.
Alrededor de las 4:30 de la madrugada todos los trabajadores, técnicos e ingenieros que participaron en el montaje y adaptación de la nueva bomba se despidieron con la alegría del deber cumplido.
Omar Machín Lemus, diputado al Parlamento cubano y presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular, expresó: “Estamos convencidos que el servicio de agua potable en el consejo popular Minas de Matahambre comenzará a restablecerse. Atrás quedarán los malos recuerdos”.