Magalys no le teme a nada

Imprimir
powered by social2s

Ratio: 5 / 5

Inicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activado
 
Valoración:
( 1 Valorar )

Llegar a ese lugar no es difícil, como sí lo es entrevistar a alguien cuya timidez intenta superar con la misma disposición regalada al trabajo en cada jornada, y ha dedicado 29 años de su vida a oficios asociados a la construcción.

Tez negra y apenas unos pocos indicios de “maltrato físico” ante su quehacer en una brigada de la Empresa de Construcción y Montaje ATTAI, de Pinar del Río, desbaratan a cualquiera los estereotipos asociados aún a las féminas que optan por ese tipo de labores.

Magalys Rivera Chacón desde su condición de ayudante de construcción, es la única mujer de la entidad vueltabajera vinculada directamente a tales tareas, y aunque ya ronda las cinco décadas de existencia, no renuncia a una profesión que le ha dado muchas satisfacciones.2 magaly

Mi familia se siente muy orgullosa de mí, de mi trabajo duro, aseguró. En ocasiones digo que estoy cansada; pero soy una persona realizada aquí e irme para otro sector ya no me sería provechoso.

Reparación de escuelas y edificación de Joven Club de Computación y Electrónica, salas de video, llevan su sello; pero para ella lo más gratificante a lo largo de su vida profesional radica en la construcción de casas para quienes perdieron las suyas a causa de ciclones tropicales, una de las prioridades hoy en la provincia.

La terminación de las obras constituye su “fuerte”: echarle derretido a los pisos y azulejos, colocar juntas, pintar, limpiar los restos de cemento; mas sus manos también han tenido que cerner arena y efectuar otras tantas actividades.

3 magalyTodo es muy fácil para mí porque he ganado en destreza cada año. El trabajo lo veo como algo normal y mis compañeros dicen: “caballero como trabaja esa mujer”, explicó mientras acomoda un pañuelo que en su cabeza protege al cabello de la arcilla que la rodea.

Lo que me pongan lo hago, pues quiero hacerlo bien y con amor. A veces me desvío de mi trabajo para ayudar a la persona que tenga al lado a cumplir su parte con éxito.

Si no estoy aquí- señala para la gente con la cual comparte día a día esfuerzos, anécdotas, sonrisas y tristezas- no me siento bien. Es algo que me “hala” porque mis compañeros me respetan y quieren mucho, acotó.

¿A otras como yo?- pregunta- que no tengan miedo. No van a dejar de ser mujeres ni de realizar las labores de la casa.

 

 

 

powered by social2s