Los integrantes de la Asociación Cubana de Medicina Veterinaria (ACMV) de Pinar del Río, rinden homenaje a la Prima Ballerina Assoluta, Alicia Alonso, quien falleciera en la mañana del pasado jueves a la edad de 98 años.
En la sede de la organización, en la capital pinareña, se lleva a cabo la firma de un libro de condolencias que posteriormente será entregado a la familia de la excepcional artista.
El doctor Jesús Moreno, presidente de la ACMV en Vueltabajo, recuerda que en el año 2010, Alicia fue declarada Miembro de Honor de la Asociación, por su conocida pasión por los animales.
Por otra parte, señala que el padre de la genial bailarina, el doctor Antonio Martínez Arredondo, fue un eminente veterinario.
Moreno destaca además los vínculos que la Prima Ballerina Assoluta mantuviera con la institución, donde estuvo de visita en varias oportunidades.
La última de ellas fue en el año 2016, cuando asistió a la inauguración de una galería en la sede ACMV que lleva precisamente el nombre de Alicia, y constituye un espacio para las artes visuales relacionadas con el mundo animal, su conducta, salud y bienestar en armonía con la naturaleza y su impacto sobre la calidad de vida del ser humano.
La primera exposición fue una muestra fotográfica con alrededor de 20 instantáneas de la bailarina, con las mascotas que tuvo a lo largo de su vida.
En el 2012, a propuesta de la filial pinareña de la Asociación Cubana de Medicina Veterinaria, la Alonso recibió el Escudo Pinareño, máxima distinción que confiere la provincia a las personalidades que sobresalen en las distintas esferas de la vida.
La relación de la fundadora del Ballet Nacional de Cuba con Pinar del Río data de hace más de seis décadas, pues en 1953 creó acá una academia de danza y dos años más tarde se le otorgó la llave de la ciudad.